La Diputación invierte 13.000 euros para habilitar una zona de juegos infantiles en Picassent
La Diputación de Valencia ha destinado 13.000 euros para acondicionar una zona de juegos infantiles en el barrio de San Ramón de Picassent.
El proyecto ha tenido un coste final de 18.000 euros, ya que el Ayuntamiento de Picassent se ha encargado de abonar la cantidad restante. Los 13.000 euros invertidos se enmarcan dentro del Plan de Actuaciones Programadas de la Diputación de Valencia, que ha destinado un total de 305.000 euros entre siete municipios de L´Horta Sud para hacer frente a diversas obras de carácter urgente.
Las obras han consistido en la creación y dotación de una zona de juegos infantiles en terrenos de zona verde, que se han encontrado en estado semi-natural, procedentes de varias actuaciones de limpieza y acumulación de tierras.
En cuanto al mobiliario suministrado, se trata de un tobogán con escalera, un balancín metálico, un columpio de madera y tubo metalizado y dos muelles en forma de motocicleta. Además se han instalado dos bancos dentro del recinto y una rampa trepadora satisfaciendo, de esta forma, la demanda de los vecinos de Picassent.
Seis millones para 191 obras urgentes
La Diputación de Valencia ha financiado en 2013 un total de 191 obras urgentes en los municipios de la provincia, con un total de 5,9 millones de euros, a través del Plan de Actuaciones Programadas (PAP).
La corporación provincial puso en marcha este año una nueva iniciativa de ayuda a los ayuntamientos, con un presupuesto inicial de cinco millones de euros, para intentar “paliar el deterioro de las haciendas locales causado por la crisis económica y asegurar la adecuada prestación de servicios a los ciudadanos”, según anunció el diputado de Cooperación Municipal, Juan José Medina.
Para ello, la institución provincial rediseñó su Plan de Actuaciones Programadas (PAP) y lo adaptó a la delicada situación que atravesaban los consistorios, con el fin de destinarlo a obras de carácter urgente y necesario en los municipios, que los ayuntamientos no podían acometer o completar por sí solos por falta de presupuesto.
El PAP 2013 se destinó, de este modo, a dar “la máxima transparencia y ordenación”, a partir de la creación de unas bases comunes a todos los consistorios, a la concesión de subvenciones que solicitan los alcaldes a la Diputación como necesidades apremiantes, por necesidad del servicio o el delicado estado de la infraestructura sobre la que es necesario operar.
Beneficiarios
En el programa de 2013 participaron municipios, entidades locales menores, mancomunidades e, incluso, agrupaciones de municipios.
Las obras preferentes a la hora de recibir ayuda económica de la Diputación fueron las relacionadas con el arreglo de espacios urbanos como parques, jardines, fuentes y paseos, la reposición de aceras y eliminación de barreras arquitectónicas en vías públicas.
También, las actuaciones relacionadas con la renovación de mobiliario urbano y de las redes de alumbrado público, así como aquellas que tuvieran mayor incidencia en la mejora de la calidad de vida de los vecinos del municipio.
“En definitiva, obras urgentes relacionadas con equipamiento, urbanización y el ciclo integral del agua, además de las relacionadas con la conclusión de inversiones realizadas por los consistorios a través del capítulo seis de sus presupuestos”, según Medina.