El MuVIM pinta su vidriera con el grito silencioso de Julieta XLF con motivo del 25N

El crit silenciós de Julieta XLF, una artista que de manera didàctica vol fer una crida a la societat entre colors i línies, pinta la vidriera del MuVIM amb dos rostres que busquen l'esperança submergits en un somni reparador i que donen nom a ‘Translúcides’, el treball de l'artista valenciana en el museu de la Diputació de València amb motiu del 25N, Dia Internacional de l'Eliminació de la Violència contra la Dona.

 

Així, unides per la frondositat del fullatge i acompanyades per dos aus del paradís, les dos protagonistes de l'obra ploren llàgrimes de sang pel dolor viscut que es vessen per la seua cares nítides amb línies contundents i colors que, de manera inquietant, narren una història.

 

El grito silencioso de Julieta XLF, una artista que de forma didáctica quiere hacer un llamamiento a la sociedad entre colores y líneas, pinta la vidriera del MuVIM con dos rostros que buscan la esperanza sumergidos en un sueño reparador y que dan nombre a ‘Traslúcidas’, el trabajo de la artista valenciana en el museo de la Diputació de València con motivo del 25 N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

 

Así, unidas por la frondosidad del follaje y acompañadas por dos aves del paraíso, las dos protagonistas de la obra lloran lágrimas de sangre por el dolor vivido que se derraman por su caras nítidas con líneas contundentes y colores que, de forma inquietante, narran una historia.

 

La autora busca unir a las personas a través de la esencia de los rostros traslúcidos de las protagonistas, lo que les convierte en hadas heridas de muerte. Busca generar una sororidad a miles de kilómetros de distancia con miles de memorias frustradas y plasmar que la educación, es una de las sendas para la invalidación de seres violentos que generan excesos contra la mujer y las niñas.

 

El trabajo de Julieta XLF, tal como señala la comisaria, Belén García Pardo, “es el canal por el que se desliza el grito silencioso de una artista que de forma didáctica quiere prevenir entre colores y líneas, prevenir para evitar el riesgo entre emociones y actitudes, educar para prevenir la violencia. Julieta XLF quiere transmitir cuánto queda por hacer hasta conseguir la eliminación de la violencia contra la mujer”.

 

Julieta XLF es licenciada en Bellas Artes y Máster en Ilustración por la Facultad de BBAA de San Carlos, Universitat Politècnica de València. En la actualidad continúa experimentando y formándose en diferentes disciplinas que combina con su actividad laboral, la pintura mural.

Su trabajo se centra desde 2004 en intervenciones murales en el espacio público tanto a nivel nacional como internacional en España, Francia, Italia, Grecia, Serbia, Bélgica, Luxemburgo, Chile, México, Bolivia, Estados Unidos, entre otros países.

 

El discurso de la artista, en sus obras, se sustenta en el uso del color y el ritmo de las líneas. Imagina y crea a partir de lo que la naturaleza le muestra, y utiliza el arte urbano como un laboratorio-espacio para la reflexión y sacudir, suavemente, las vidas de otras personas.

 

Asimismo, el muro del MuVIM estrena nueva imagen de la mano de Cachetejack. Bajo el título ‘Voy a cambiar’, las dos artistas involucradas en este dúo buscan crear una conexión perfecta entre un personaje de la cultura popular tan conocido como Pinocho y un texto claro. Cuánto más se repite la frase “voy a cambiar”, más crece la nariz, hasta, prácticamente, romper el mural. El mural de Cachetejack, como dice Vinz, “habla del hombre que desea la redención, que asume sus comportamientos y promete evolucionar, pero sabiendo que no cambiará porque se encuentra más cómodo en su posición privilegiada, porque cambiar requiere tiempo y esfuerzo”.

 

Cachetejack es el nombre artístico del dúo de ilustradoras formado en 2011 por Nuria Bellver (Torrent) y Raquel Fanjul (Alcañiz). Sus ilustraciones sintéticas y vibrantes, muy cercanas al espectador, implican siempre una doble lectura, por un lado, cuestionan diversos aspectos de la vida diaria con su actitud crítica y, por otro, invitan al público a que haga su propia interpretación, haciéndole partícipe de su trabajo.