La Diputació de València ha presentado la publicación ‘Fem xarxa, teixim complicitats’, una compilación de diversas acciones para el fomento lector desarrolladas en el marco de colaboración entre la Fundación Full y el área de Cultura de la corporación provincial.

 

En el acto, realizado en el salón Alfons el Magnànim de la Beneficiència, han intervenido el diputado de Cultura, Xavier Rius, y el presidente de la Fundación Full, Jesús Figuerola. Además se ha desarrollado una charla con los representantes de las ciudades participantes en el programa, en la que han podido trasladar los avances conseguidos en la promoción de los hábitos lectores.

 

El proyecto Ciudades lectoras sirve de acompañamiento a ciudades y pueblos, y cada municipio establece su propio plan de acción, ajustado a una rúbrica o evaluación preliminar. El programa aspira a tres objetivos básicos: promover los hábitos lectores del municipio y aumentar el interés por la cultura; promover la participación ciudadana, estableciendo complicidades y sinergias con la población; y finalmente, dinamizar activamente los municipios.

 

El proyecto arrancó con la primera adscripción del pueblo de Utiel a principios de 2017. Según Manuela Gallega, representante de las bibliotecas municipales de Utiel, fue un momento emocionante al detectar la disponibilidad del Ayuntamiento a sumarse a la promoción de los hábitos lectores. A continuación, el alcalde y miembro del Consejo de lectura de Bocairent, Xavier Molina, repasó también la trayectoria de su municipio, adherido desde un principio a la transformación de los modelos de lectura con la colaboración de la mayoría del tejido social de Bocairent.

 

Enric Campos, bibliotecario de Paiporta quiso incidir en la visión transversal del proyecto, afirmando que "Ciudades lectoras ha hecho posible un objetivo idílico, que se ha apoyado en las personas". Miquel Puig, de l'Alcúdia, habló de la adecuación y contextualización del proyecto a la realidad de Paiporta, con personas de distintos estamentos sociales que han podido confluir en un mismo proyecto.

 

En Marines, Carmen Escrihuela, directora del colegio público y miembro del Consejo lector, señaló que “nuestra realidad es la de una población pequeña, lo que permite que las propuestas sean mucho más horizontales y participativas. Hemos puesto en marcha iniciativas muy divertidas, como poder hacer reseñas de libros en el bando municipal, entre otras acciones”.

 

Conxa Garcia, de El Puig, pudo contar cómo una apuesta tan arriesgada se ha convertido en un modelo de éxito para el municipio, permitiendo los encuentros de intercambio entre técnicos y participantes. Miguel Hernández, técnico de bibliotecas de Alberic habló de la visión transversal del proyecto, y de cómo los modelos de fomento de la lectura han llegado a varios espectros de edad con el asesoramiento de los especialistas de Full.

 

Con todo, las experiencias se han demostrado muy positivas en el estímulo de los hábitos lectores de ciudades medianas y pueblos pequeños, permitiendo cierto optimismo en la recuperación de público lector y en la promoción del libro.