El Modelo de Impacto NEB: Una Guía para Transformar Ciudades hacia la Sostenibilidad
La Nuevo Bauhaus Europea (NEB), como iniciativa emblemática de la Comisión Europea, busca conectar el Pacto Verde Europeo con la vida cotidiana y los espacios en los que vivimos. Basándose en los principios de sostenibilidad, estética e inclusión, la NEB promueve un enfoque transdisciplinario y participativo para transformar las ciudades en lugares más sostenibles y habitables. En este contexto, el proyecto CrAFt (Creating Actionable Futures) ha desarrollado el Modelo de Impacto NEB, una herramienta diseñada para guiar y evaluar intervenciones urbanas complejas.
La Nuevo Bauhaus Europea (NEB), como iniciativa emblemática de la Comisión Europea, busca conectar el Pacto Verde Europeo con la vida cotidiana y los espacios en los que vivimos. Basándose en los principios de sostenibilidad, estética e inclusión, la NEB promueve un enfoque transdisciplinario y participativo para transformar las ciudades en lugares más sostenibles y habitables. En este contexto, el proyecto CrAFt (Creating Actionable Futures) ha desarrollado el Modelo de Impacto NEB, una herramienta diseñada para guiar y evaluar intervenciones urbanas complejas.
¿Qué es el Modelo de Impacto NEB?
Este modelo actúa como una guía integral para ciudades que desean implementar los principios de la NEB, ofreciendo un enfoque sistémico que abarca cinco pilares principales: planeta, personas, prosperidad, calidad de vida y gobernanza. Dentro de estos pilares, se identifican 17 categorías de impacto, como sostenibilidad ecológica, infraestructura, aspectos sociales, culturales y económicos, entre otros. El modelo no solo busca evaluar el progreso hacia la sostenibilidad, sino también fomentar la cooperación interdisciplinaria y la co-creación con los ciudadanos y actores locales.
Características principales
El Modelo de Impacto NEB se presenta como una herramienta flexible y adaptable, diseñada para integrarse con los sistemas de monitoreo e indicadores existentes en las ciudades. Entre sus características destacadas, se encuentra su capacidad para:
- Identificar puntos de apalancamiento esenciales para el cambio sistémico hacia la neutralidad climática y la resiliencia.
- Documentar co-beneficios de las intervenciones urbanas, como la mejora de la calidad de vida, la reducción de la pobreza energética o la creación de empleo local en sectores verdes.
- Proporcionar un marco para evaluar tanto indicadores cuantitativos (como las emisiones de CO2) como cualitativos (como la calidad de las redes sociales en un vecindario).
Aplicaciones prácticas y beneficios
El modelo ha sido diseñado para abordar desafíos urbanos como la rehabilitación energética de edificios, la transformación de infraestructuras y la implementación de soluciones de energía renovable. Por ejemplo, al renovar energéticamente una vivienda, no solo se reduce el consumo de energía y las emisiones de carbono, sino que también se mejora la salud y el bienestar de los habitantes, se genera empleo local y se incrementa el valor de las propiedades.
Otro ejemplo es la conversión de una carretera de circunvalación en un bulevar verde, lo que mejora la movilidad sostenible, reduce la contaminación y crea espacios públicos más seguros y sociables. Además, la implementación de infraestructuras de energía renovable no solo contribuye a la autonomía energética, sino que también fortalece la economía local al generar empleos y reducir las fugas económicas hacia el exterior.
Implicaciones futuras
El Modelo de Impacto NEB no solo evalúa proyectos individuales, sino que también tiene como objetivo desarrollar un enfoque integrado que permita a las ciudades colaborar más efectivamente con socios públicos y privados. Esta herramienta se alinea con otras iniciativas europeas, como NetZeroCities, y complementa marcos de evaluación como el NEB Compass, facilitando una transición hacia ciudades más sostenibles, resilientes e inclusivas.
En resumen, el Modelo de Impacto NEB representa un avance significativo en la planificación y ejecución de proyectos urbanos sostenibles. Su enfoque sistémico, centrado en la colaboración y el aprovechamiento de co-beneficios, ofrece a las ciudades una hoja de ruta clara para liderar la transición hacia un futuro más verde y equitativo.