Las Ciudades como Catalizadoras de Resiliencia: Perspectivas de la OCDE a partir de las Crisis Recientes

El informe de la OCDE Convertir la Crisis en Cambio: Caminos Post-Pandemia hacia la Resiliencia en Tiempos Complejos subraya el papel fundamental que juegan las ciudades como centros de actividad económica, social y cultural, a la vez que destaca su vulnerabilidad ante crisis como desastres naturales, pandemias y choques económicos. Con más de la mitad de la población mundial viviendo en áreas urbanas, estos espacios son particularmente sensibles a los beneficios y riesgos que implica la alta densidad poblacional y los sistemas interconectados. El informe extrae lecciones de las crisis recientes y aboga por un enfoque sistémico de la resiliencia, sugiriendo que las ciudades deben prepararse para futuras disrupciones, priorizando la sostenibilidad y la inclusión.

El informe de la OCDE Convertir la Crisis en Cambio: Caminos Post-Pandemia hacia la Resiliencia en Tiempos Complejos subraya el papel fundamental que juegan las ciudades como centros de actividad económica, social y cultural, a la vez que destaca su vulnerabilidad ante crisis como desastres naturales, pandemias y choques económicos. Con más de la mitad de la población mundial viviendo en áreas urbanas, estos espacios son particularmente sensibles a los beneficios y riesgos que implica la alta densidad poblacional y los sistemas interconectados. El informe extrae lecciones de las crisis recientes y aboga por un enfoque sistémico de la resiliencia, sugiriendo que las ciudades deben prepararse para futuras disrupciones, priorizando la sostenibilidad y la inclusión.

La Resiliencia como Imperativo Fundamental
El informe sostiene que la resiliencia es esencial para que las ciudades soporten y se adapten a las crisis. Dada la alta concentración de infraestructura, personas y actividades económicas en las áreas urbanas, una alteración en un sector puede afectar a otros, produciendo efectos en cadena. Por ejemplo, eventos climáticos extremos como olas de calor e inundaciones no solo dañan la infraestructura, sino que también tensionan los sistemas de salud y exacerban las inequidades sociales. Así, una planificación proactiva, inversiones estratégicas y una gobernanza innovadora son claves para mantener a las ciudades como motores de crecimiento y seguridad.

Nueve Lecciones para Repensar la Política Urbana
La OCDE identifica nueve lecciones clave para rediseñar las políticas urbanas:

  1. Abordar las Desigualdades: La resiliencia depende de reducir las desigualdades, ya que las crisis afectan desproporcionadamente a las poblaciones vulnerables.
  2. Aprovechar la Densidad: Aunque los entornos urbanos densos ofrecen eficiencias, también requieren una gestión cuidadosa para reducir el impacto ambiental y mejorar la accesibilidad.
  3. Construir Confianza con los Ciudadanos: Una gestión de crisis efectiva se basa en un contrato social sólido entre los ciudadanos y las autoridades locales.
  4. Respuestas Adaptadas: Los esfuerzos de los gobiernos centrales deben alinearse con las condiciones locales para que las respuestas a las crisis sean efectivas.
  5. Alinear Capacidades Nacionales y Locales: La gobernanza coordinada permite a las ciudades movilizar recursos rápidamente y adaptar soluciones.
  6. Equilibrar Necesidades Corto y Largo Plazo: Las intervenciones de corto plazo deben apoyar, no obstaculizar, los objetivos de sostenibilidad a largo plazo.
  7. Abrazar la Transformación Digital: El auge de la digitalización ofrece nuevas vías para la resiliencia urbana, pero requiere adaptación al déficit digital.
  8. Diversificar las Cadenas de Valor: Reducir la dependencia de las cadenas de suministro globales puede fortalecer la resiliencia económica local.
  9. Promover Transiciones Verdes y Justas: Las crisis crean oportunidades para avanzar hacia sistemas urbanos sostenibles y equitativos.

Marco para Fortalecer las Ciudades del Futuro
Mirando hacia adelante, el informe propone un marco de cuatro pilares: resiliencia, proximidad, suficiencia y justicia, como guía para la resiliencia urbana. Al integrar estos valores en sus políticas, las ciudades pueden crear sistemas robustos que resistan perturbaciones, reduzcan desigualdades, aseguren un uso sostenible de los recursos y fomenten la cohesión social. Con esfuerzos coordinados entre los gobiernos locales y nacionales, las ciudades pueden navegar mejor los desafíos modernos y salir fortalecidas, más verdes e inclusivas.

La OCDE enfatiza que enfrentar las complejidades urbanas requiere encontrar sinergias entre objetivos de política como el crecimiento económico, la protección ambiental y la equidad social. Adoptando una visión de futuro, las ciudades pueden transformar las crisis en oportunidades para la resiliencia y el bienestar a largo plazo de sus habitantes.

 

Informe completo