La Diputació de València trabaja en un decreto mediante el cual se preguntará al Consell Jurídic Consultiu (CJC) por las cuestiones técnicas sobre el concurso público para la gestión del ciclo del agua, así como la mejor opción para el futuro de la empresa mixta Egevasa, que en la actualidad tiene un 49% de capital privado a través de la empresa Aguas de Valencia y un 51% de titularidad pública bajo la responsabilidad de la corporación provincial.
A raíz de la presentación este viernes de una moción en el pleno por parte del grupo popular sobre Egevasa, el presidente ha retrocedido hasta el origen de la empresa para explicar su evolución desde 1998 y proponer la consulta al CJC como una opción de consenso entre la práctica totalidad de los grupos políticos representados en la Diputació, los técnicos de la corporación y los responsables de la EPSAR, la entidad de saneamiento de aguas residuales del Consell, que cuestiona el convenio firmado hace dos décadas entre los entes autonómico y provincial.
Gaspar ha asumido su responsabilidad en la Diputació y Egevasa y ha defendido la consulta técnica como “la mejor opción para resolver el futuro de la empresa desde el diálogo y el consenso, con la legislación en la mano”, al tiempo que se ha dirigido a los representantes de los trabajadores de Egevasa para pedirles paciencia y confianza en la gestión del actual equipo de gobierno provincial, que “ante todo tiene claro que lo primero son las personas y garantizar la continuidad de los puestos de trabajo, como hicimos en Divalterra”.
Tras reunirse este jueves con los responsables de Egevasa, técnicos de la corporación y representantes de la EPSAR, Gaspar ha recibido a los trabajadores en su despacho tras el pleno de este viernes, donde les ha pedido “confianza en este presidente que comprende el nerviosismo, pero hará todo lo posible para defender los intereses de una plantilla que es parte de la Diputación y por lo tanto mi responsabilidad”. El presidente ha recordado a los representantes de los trabajadores de Egevasa el caso reciente de sus compañeros de Divalterra y ha insistido en que tengan paciencia y confíen en su gestión porque está en juego su honorabilidad.
Reconstrucción cronológica
La moción sobre el futuro de Egevasa ha centrado la sesión plenaria de noviembre en la Diputació. El presidente, que apuesta por “el silencio mientras haya tanto ruido y no escuchemos a los que mejor conocen el asunto, que son los que deben pronunciarse”, ha reconstruido cronológicamente la privatización en 1998 de parte de la empresa antes de pedir a las diputadas y diputados que recapacitasen sobre la idoneidad de votar una moción sin los informes jurídicos oportunos.
Gaspar ha asegurado que “el problema de la gestión de las depuradoras viene desde hace tiempo, desde el momento en que la Diputación seleccionó al socio privado para vender el 49% de Egevasa”. En aquel concurso público de los años 90, Vaimosa compró ese 49% de la empresa pública, y tras muchos informes a favor y en contra a lo largo de estos años, Toni Gaspar se reunió este jueves con todas las partes implicadas para “arrojar luz al conflicto de las depuradoras desde el diálogo y por encima de tuits o declaraciones altisonantes”.
Lo que hoy está en duda es si aquel concurso habilita cualquier licitación y qué trabajos puede encargar la Diputación a Egevasa, y por eso se opta por la vía de consultar al CJC a través de una pregunta concreta que pueda resolver esa duda. “A partir de ese momento, con una seguridad jurídica, este presidente irá donde sea necesario para defender a los trabajadores y la empresa, que es de la Diputación”, ha concluido Gaspar.
